Cuándo comienzas a buscar información sobre la nutrición canina o sigues a profesionales en redes sociales terminas sufriendo una sobresaturación de información sin contexto, terminando por pensar qué no sabes nada sobre tu mascota o no estas capacitado para tener perro.

No te dejes llevar por el marketing exagerado, hoy vamos a conocer qué necesidades biológicas y digestivas tiene tu perro para que, finalmente, tomes decisiones sobre su alimentación basadas en tu conocimiento y experiencia y no en el de otros ¡Vamos allá!

Los nutrientes que tu perro SI necesita

  1. Proteínas: Fundamental para el desarrollo y mantenimiento de tejidos, músculos y órganos. Aproximadamente el 18-25% de la dieta debe consistir en proteínas de alta calidad.
  2. Grasas: Importantes para la salud de la piel, el pelaje y la función celular. Alrededor del 10-15% de la dieta debe provenir de grasas saludables, incluyendo ácidos grasos omega-3 y omega-6.
  3. Carbohidratos: Proporcionan energía. Cerca del 30-70% de la dieta puede provenir de fuentes de carbohidratos como granos enteros y verduras.
  4. Vitaminas y Minerales: Esenciales para diversas funciones biológicas. Una dieta variada con frutas y verduras en un 5 o 7% de la dieta total debe cubrir estas necesidades.
  5. Agua: Vital para la hidratación y funciones fisiológicas. Asegúrate de que siempre haya agua fresca disponible. Si crees que tu perro bebe poca agua añade a su dieta comida húmeda.

Tu perro es carnívoro

Aunque por muchos sean denominados onmnívoros, los perros, de manera natural son carnívoros debido a su ancestral herencia como depredadores. A lo largo de la evolución, sus ancestros se adaptaron a una dieta basada en carne para obtener los nutrientes esenciales que necesitan para mantenerse saludables y activos. La carne proporciona proteínas de alta calidad, grasas y otros nutrientes clave que son fundamentales para su bienestar. Aunque la domesticación ha traído algunas adaptaciones en su alimentación, es importante recordar que, en su núcleo, los perros aún conservan esa preferencia por la carne como parte integral de su dieta para satisfacer sus necesidades nutricionales.

El pienso de los perros ¿es un alimento ultraprocesado o es seguro?

La característica distintiva de los alimentos ultraprocesados es su grado de transformación y la presencia de aditivos, colorantes, saborizantes y otros ingredientes sintéticos que no formaban parte de los alimentos iniciales. Si nos acogemos a esta definición los piensos para perros vendrían a ser los alimentos ultraprocesados del mundo canino.

Pero también tengo que decir que existen piensos con procesos que degradan menos los nutrientes de los alimentos, o que tienen un porcentaje de proteínas y grasas superior, o que no se hacen con un porcentaje alto de cereales… existen piensos que tienen unos estándares de calidad muy aceptables hablando de nutrición.

Los ingredientes de la comida para perros ¿Cómo leer la etiqueta del pienso?

La importancia del orden de los ingredientes en la etiqueta de un pienso radica en la proporción en la composición, siendo los primeros más abundantes.

¿Cuánta proteína tiene que tener el pienso para perro? En su mayoría, las proteínas, provenientes de carnes y legumbres, encabezan la lista, seguidas de hidratos de carbono, grasas, vitaminas y minerales. En términos porcentuales, para perros adultos se recomienda un 30% de proteína y entre un 10% y 20% de grasa, considerando tanto la cantidad de grasa bruta como los ácidos grasos esenciales.

La elección entre ingredientes específicos y genéricos es crucial; es preferible optar por piensos que detallen «carne deshidratada de pollo» en lugar de simplemente «carne». Lo mismo aplica para especificar la especie, como «carne de pollo» frente a «carne de ave».

Además, es esencial incorporar nutrientes esenciales como aminoácidos (metionina, histidina, lisina, triptófano, leucina y taurina) y ácidos grasos esenciales (omega-6 y omega-3), obtenidos de semillas y pescado.

Un pienso de calidad también proporciona una variedad de ingredientes que actúan como fuentes naturales de vitaminas y minerales. Por ejemplo, el aceite de pescado aporta omega-3, la grasa animal omega-6, y diversas fuentes como hígado, yema de huevo, semillas, vegetales, frutas y leguminosas contribuyen con vitaminas A, D, E, K, B, ácido fólico, biotina y minerales como calcio, hierro y potasio.

En cuanto a cenizas y fibra, se sugiere que las cenizas no superen el 8%, ya que resultan de altas temperaturas en la fabricación del pienso y pueden indicar un alto contenido de hueso o espinas de pescado. La fibra, esencial para la motilidad intestinal, debe situarse entre el 3% y 5%, fomentando la masticación y la fricción mecánica dental.

Qué debes evitar en el pienso de tu perro

Evitar piensos con aditivos, como colorantes, es crucial, ya que suelen indicar una calidad inferior y son comúnmente encontrados en piensos de gama baja en supermercados. En resumen, comprender la etiqueta del pienso y elegir conscientemente basándose en estos criterios contribuirá a garantizar una dieta equilibrada y de calidad para las mascotas.

Dieta BARF

La dieta BARF para perros, acrónimo de «Biologically Appropriate Raw Food» o «Bones and Raw Food», se basa en proporcionar alimentos crudos y naturales a los perros, imitando la dieta que tendrían en estado salvaje. Esta dieta incluye carne cruda, huesos carnosos, vísceras y vegetales.

Los beneficios de la dieta BARF incluyen una mejora en la salud dental, piel más saludable, pelo brillante, mayor energía y un sistema inmunológico fortalecido. Sin embargo, surge la preocupación por las bacterias presentes en la carne cruda, como la salmonela o la bacteria E. coli.

Para evitar problemas bacterianos, la congelación se convierte en una práctica clave en la dieta BARF. Congelar la carne a temperaturas bajo cero por un período específico ayuda a eliminar parásitos y bacterias perjudiciales. La congelación a -18 grados Celsius durante al menos 72 horas suele ser suficiente para reducir significativamente el riesgo.

Cómo cocinar para tu perro: 7 Recomendaciones

  1. Proteínas de Calidad: La base de la dieta debe ser una fuente de proteínas de calidad. Carne magra de res, pollo, pavo, pescado, huevos y productos lácteos bajos en grasa son excelentes opciones. Asegúrate de que representen al menos el 50% de la dieta.
  2. Hidratos de Carbono y Vegetales: Incluye fuentes de carbohidratos como arroz integral, batatas, quinoa y vegetales como zanahorias, calabazas y espinacas. Estos proporcionan fibra, vitaminas y minerales esenciales.
  3. Grasas Saludables: Agrega grasas saludables a través de aceites como el de oliva o el de pescado, que son ricos en ácidos grasos omega-3. Estos son beneficiosos para la piel y el pelaje.
  4. Suplementos Nutricionales: Considera la posibilidad de incluir suplementos como calcio, vitaminas y minerales para asegurar que la dieta sea completa y balanceada.
  5. Evita Ciertos Alimentos: Algunos alimentos como cebollas, ajo, chocolate y huesos cocidos pueden ser perjudiciales para los perros. Evita estos ingredientes en la preparación de la comida.
  6. Proporciones Adecuadas: Ajusta las porciones según el tamaño, peso y nivel de actividad de tu perro. Consulta con un veterinario para determinar las cantidades precisas.
  7. Cocción Adecuada: Cocina los alimentos de manera segura, evitando condimentos y cocciones excesivas que puedan eliminar nutrientes. La carne debe estar bien cocida para prevenir enfermedades.

Las Dietas Mixtas para perros

La dieta mixta para perros es una excelente opción que combina diferentes formas de alimentación para adaptarse a las necesidades y preferencias individuales de cada mascota. Aquí hay algunas variantes de dietas mixtas y sus beneficios:

  1. Pienso + BARF (Biologically Appropriate Raw Food): Esta combinación aprovecha las ventajas del pienso seco, que es conveniente y contiene nutrientes balanceados, junto con la frescura y los beneficios nutricionales de la dieta BARF. Proporciona una textura y sabor variados, manteniendo la comodidad del pienso.
  2. Pienso + Comida Cocinada: Integrar pienso con alimentos cocinados agrega diversidad a la dieta. Puedes cocinar carnes magras, vegetales y granos para complementar el pienso. Esto aporta variedad de sabores, texturas y nutrientes adicionales.
  3. BARF + Comida Cocinada: Esta opción combina la dieta cruda y fresca de BARF con alimentos cocinados. Puedes incluir proteínas crudas, huesos carnosos y vísceras junto con una porción de comida cocinada como arroz y pollo. Esto ofrece una mezcla equilibrada de nutrientes y opciones culinarias.

Las dietas mixtas permiten ajustar la alimentación según las preferencias y necesidades individuales de cada perro. Sin embargo, es esencial planificar cuidadosamente para garantizar que la dieta sea completa y balanceada. Algunos perros pueden tener necesidades específicas, como alergias alimentarias o condiciones de salud, por lo que la asesoría de un veterinario o nutricionista canino es crucial al diseñar una dieta mixta.

Si tienes dudas o necesitas ayuda para planificar una dieta mixta para tu perro, no dudes en contactarnos por WhatsApp en el emoticono que tienes en la parte inferior derecha de tu pantalla. Estaremos encantados de proporcionarte orientación y consejos personalizados para garantizar la mejor nutrición para tu familia peluda.

Frutas, verduras y hortalizas: son complementarias a su dieta y aportan nutrientes esenciales

Desde una perspectiva nutricional canina, las frutas, verduras y hortalizas se perfilan como elementos complementarios esenciales en la dieta, aportando nutrientes que contribuyen a la salud integral del perro. Estos alimentos, aunque los perros son fundamentalmente carnívoros, ofrecen una variedad de vitaminas, minerales y fibras beneficiosas. Las frutas, como manzanas y bayas, suministran antioxidantes que promueven la salud celular y combaten el estrés oxidativo. Las verduras, como zanahorias y espinacas, proporcionan vitaminas A y K, esenciales para la visión y la coagulación sanguínea. Asimismo, las hortalizas, como el brócoli, aportan minerales como el calcio y el fósforo, fundamentales para la salud ósea. A pesar de su naturaleza carnívora, la inclusión de estos alimentos en la dieta canina puede optimizar la ingesta de nutrientes clave, respaldando aspectos específicos de la salud que la dieta exclusivamente carnívora podría no abordar de manera tan completa.

Los complementos y suplementos aptos para perros

La incorporación de complementos y suplementos, como los hongos medicinales, constituye un componente relevante en la optimización de la salud canina desde una perspectiva técnica y profesional. Los hongos medicinales, como el Ganoderma lucidum y el Cordyceps sinensis, poseen propiedades bioactivas que pueden ofrecer beneficios significativos para la salud. Estos hongos contienen compuestos como beta-glucanos, polisacáridos y triterpenoides, que han demostrado propiedades inmunomoduladoras y antiinflamatorias en estudios científicos.

La inclusión de estos suplementos puede fortalecer el sistema inmunológico del perro, mejorar la resistencia a enfermedades y promover un equilibrio adecuado en la respuesta inflamatoria. Además, algunos hongos medicinales han mostrado capacidad para apoyar la salud cardiovascular y la función hepática.

Omega 3 y 6 para perros: Más que un complemento

Los ácidos grasos omega-3 y omega-6 juegan un papel crucial en la salud de los perros, respaldado por evidencia científica. Los estudios han demostrado que una proporción adecuada de estos ácidos grasos es esencial para mantener la salud cutánea, promover el brillo del pelaje y respaldar la función cognitiva.

Los ácidos grasos omega-3, como el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA), se han asociado con beneficios antiinflamatorios y se ha demostrado que mejoran la salud de la piel y el pelaje en perros. Además, se ha observado que estos ácidos grasos desempeñan un papel importante en el desarrollo y mantenimiento del sistema nervioso central.