Hay momentos en la vida de un perro en el que parece que todo le hace daño en el sistema digestivo, normalmente esto puede deberse a dos factores; el desconocimiento sobre la naturaleza y nutrición canina y por otro lado problemas de salud. Si tienes problemas o dudas con la alimentación de tu perro haznos tu consulta directamente por Whatsapp, tienes un enlace directo en la parte inferior derecha de tu pantalla.

Posibles causas de la diarrea, vómitos o problemas intestinales en perros:

  • Infecciones: Bacterianas, virales o parasitarias como el parvovirus, la gastroenteritis infecciosa o los gusanos intestinales.
  • Cambios en la dieta: Introducción repentina de nuevos alimentos o cambios bruscos en la alimentación.
  • Intolerancias alimentarias: Algunos perros pueden ser sensibles a ciertos ingredientes en su comida.
  • Ingesta de objetos extraños: Algunos perros tienen la tendencia de comer cosas que no deberían, lo que puede causar obstrucciones intestinales.
  • Enfermedades gastrointestinales: Como la enfermedad inflamatoria intestinal, pancreatitis o colitis.
  • Alergias: Reacciones alérgicas a ciertos alimentos o sustancias.
  • Estrés: Cambios en el ambiente, rutina o situaciones estresantes pueden afectar el sistema digestivo.

Síntomas de problemas gastrointestinales en perros:

  • Diarrea: Heces líquidas o sueltas.
  • Vómitos: Expulsión del contenido estomacal con fuerza.
  • Pérdida de apetito: Falta de interés en la comida.
  • Letargo: Falta de energía o debilidad.
  • Dolor abdominal: El perro puede estar incómodo o tender a adoptar una posición encorvada.
  • Gases: Flatulencias o eructos frecuentes.
  • Sangre en las heces o vómitos: Puede indicar problemas más graves y requiere atención inmediata.

Remedios naturales para problemas gastrointestinales en perros:

Siempre consulta a un veterinario antes de administrar cualquier remedio, especialmente si los síntomas son graves o prolongados.

  1. Ayuno y reintroducción gradual: Deja que el perro descanse su sistema digestivo durante 12-24 horas. Luego, reintroduce alimentos suaves y fáciles de digerir en pequeñas cantidades.
  2. Dieta adecuada: Aunque una de las leyendas urbanas más conocida es que es beneficioso dar a tu perro o gato arroz cuando tienen problemas gastrointestinales, evita hacer esto, ya que el arroz es un cereal que no debe ser incluído en la dieta del perro ni en grandes cantidades ni durante mucho tiempo. Carnes magras crudas o hervidas y/o caldo de pollo serían opciones mucho más adecuadas.
  3. Calabaza: Puede ayudar a regular las heces debido a su contenido de fibra.
  4. Probióticos naturales: Alimentos como el yogur natural sin azúcar o suplementos probióticos específicos para perros pueden mejorar la salud intestinal.
  1. Infusión de manzanilla: Puede tener propiedades antiinflamatorias y calmantes para el sistema digestivo.
  2. Hidratación: Asegúrate de que el perro beba suficiente agua para prevenir la deshidratación.
  3. Control de la dieta: Evita dar alimentos humanos que puedan ser perjudiciales y mantén una dieta constante.